Fue un encuentro ludico-festivo donde los catequistas del
arciprestazgo pudieron compartir momentos de humor y alegría, ayudando
a conocerse mejor y sacar lo mejor de si mismos. Sabiendose llamados por Cristo a desempeñar su misión, terminó la jornada
con la Eucaristía donde expresaron su solidaridad con los más desfavorecidos en forma de donación de alimentos en el momento del
ofertorio.